El derecho a la VIDA

Al pie del Verdún, antes de comenzar el recorrido del Vía Crucis, cuando pasaban las 15 horas y el sol apenas entibiaba el aire, el Obispo de Minas, monseñor Jaime Fuentes, hizo un fuerte alegato contra la ley que habilita el aborto y a favor del plebiscito del próximo domingo.
Fuentes invitó a rezar por “las mujeres que van a ser madres y por los niños que van a dar a luz; por nuestra Patria y por sus gobernantes”. También pidió a la Virgen por las mujeres que “deciden abortar y por aquellos que apoyan” esta ley.
Dijo que lo que se propone el domingo es que los uruguayos manifestemos nuestra voluntad para que haya un referéndum, para poder derogar esa ley, que considera “a todas luces terriblemente injusta” y que hace un “daño muy grande a las mujeres y la criatura que lleva en su seno”.
En ese sentido hay que “contar con todos los medios y hay medios humanos y medios divinos, y el más fuerte es la oración”, por eso convocó a todo el que quisiera acompañarlo a rezar. Según su postura la aceptación social del aborto es “el mayor mal de una sociedad”, porque no puede haber nada por encima del derecho a la vida.

Los obispos de la Iglesia Católica reiteraron en estas horas una declaración difundida con anterioridad, unos días después de la sanción de la ley de despenalización del aborto, en la que exhortan a la población a concurrir a votar el domingo 23 de junio.

"Los derechos humanos y este primordial derecho a la vida no pueden quedar sujetos a mayorías circunstanciales de un cuerpo legislativo o electoral. Sin embargo, ante la situación que se ha creado, sigue siendo el deber de los laicos católicos y de los hombres y mujeres de buena voluntad aportar sus esfuerzos para procurar que nuestra legislación respete el derecho a la vida humana desde su concepción. Quedando en manos de los ciudadanos la elección de los medios que estimen oportunos, alentamos las iniciativas legítimas que busquen la derogación de esta ley", dice uno de los puntos de aquella declaración, ahora reiterada y actualizada por los obispos uruguayos.
Un segundo punto de la declaración sostiene que "los uruguayos tenemos ahora la oportunidad de cambiar con nuestro voto el rumbo de las cosas y darle un sí a la vida de los niños, lo que nos permitirá mirar con esperanza nuestro futuro como nación".

"El derecho a la vida no puede nunca ser objeto de un referéndum, desde el momento que proviene de Dios. Sin embargo, ante esta ley injusta, dado que nuestra Constitución prevé que los ciudadanos puedan expresar su voluntad de derogarla, exhortamos a votar el próximo domingo 23", concluye la declaración de los obispos.
Ext. de EL PAIS

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